Esa laguna del campo, que me ocupa tantas hectáreas ……
Muchos tipos de vegetación se encuentran dentro y alrededor de cuerpos de agua, pudiendo ocasionar varios tipos de inconvenientes a sus propietarios o usuarios. Pueden estar enraizadas en el fondo o ser flotantes, estar sumergidas o ser emergentes. En un medio bien balanceado la vegetación provee alimento, refugio para peces, substrato a invertebrados y aporta oxígeno al medio. El medio acuático se suele desequilibrar por un aporte externo de nutrientes o de sedimentos al cuerpo de agua. Ese aporte suele deberse a prácticas agrícolas (lavado de fertilizantes y agroquímicos, laboreos, etc.), drenaje de efluentes domésticos, industriales o agroindustriales, erosión, etc. Esto lleva a un fenómeno llamado eutrofización, el que suele manifestarse por una gran proliferación de vegetación acuática. Este fenómeno ocasiona una serie de inconvenientes a los usuarios de estos cuerpos de agua, que van desde el simple desagrado estético hasta serios perjuicios económicos.
En lagos el exagerado crecimiento de vegetación ocasiona una disminución de la abundancia de las especies útiles para pesca deportiva, dificulta el uso de motores fuera de borda, impide la pesca comercial con redes y las inhabilitan para practicar natación.
En los canales de riego y los sistemas de drenaje suelen restringir o impedir el paso del agua reduciendo severamente su utilidad. También suelen obstruir compuertas, canales de distribución, tomas de agua, estaciones de bombeo, etc.; ocasionando grandes pérdidas de agua por evaporación; aumenta el peligro de inundaciones por colmatación de canales y se modifica la calidad del agua.
En represas utilizadas para bebidas de animales pueden dificultar el consumo de agua por la hacienda, así como causar problemas de toxinas por crecimiento explosivo de algas.
En reservorios de agua utilizados para consumo humano suelen causar problemas de coloreado, agregado de olores y sabores desagradables, taponamiento de filtros y hasta liberación de toxinas de algas.
En cuerpos de agua utilizados para fines ornamentales (lagunas privadas, canchas de golf, countries, etc.) la proliferación de malezas acuáticas contradice totalmente el fin con que fueron hechas y por lo contrario ofrecen una imagen desagradable.
METODOS DE CONTROL
Existen varios métodos de control de malezas acuáticas.
Los principales son los siguientes:
- Remoción física. Este método sólo puede utilizarse en pequeños cuerpos de agua. Es un sistema laborioso, muy seguro y efect
- Remoción mecánica. Existe maquinaria específica diseñada para el corte y recolección de vegetación acuática indeseable. Si son utilizados estratégicamente y acompañados de otros métodos suelen ser eficaces. Son sistemas costosos pero permite una utilización posterior del material recolectado.
- Manipulación del medio. Por algún método se procura modificar el medio para impedir el crecimiento exagerado de vegetación.
Se pueden usar fondos de diversos materiales artificiales, producir un sombreado o coloreado del agua, diluir los nutrientes con aguas pobres (generalmente de napa), ocasionar periódicos vaciados o descensos del nivel del agua o dragado del fondo. Todos estos métodos son drásticos, costosos y no suelen utilizarse en grandes extensiones. Muchos de ellos ocasionan grandes mortandades de peces y expulsan a otros habitantes naturales de las lagunas (nutrias, garzas, gallaretas, etc.).
- Control biológico. Se procura utilizar animales herbívoros, enfermedades o parásitos naturales de las plantas para su control. Es un método lento, económico pero que en muchos casos se encuentra todavía en un período experimental. Esta variante debe ser aplicada con sumo cuidado por tratarse generalmente de especies exóticas para nuestro país que pueden ocasionar grandes desequilibrios ecológicos. Se debe procurar utilizar líneas genéticas estériles o especies que no se reproduzcan naturalmente en el medio donde van a sembrarse. La utilización del SOGYO (pez herbívoro de origen chino) se encuadra en esta categoría. Si se lo utiliza bien, se lo complementa con otros métodos y se maneja correctamente la laguna, representa una excelente alternativa para el productor.
- Control químico. Este es el sistema más utilizado, más versátil, de rápida aplicación, con unrápido efecto, de buena selectividad. Requiere poca mano de obra y su utilización es barata. Si son correctamente aplicados pueden no interferir significativamente con otros estratos del medio. El gran inconveniente de este método es que deben ser hechos con sumo cuidado para no contaminar el agua o causar grandes mortandades de vegetación. Al descomponerse pueden producir un severo déficit de oxígeno disponible para los organismos vivos del sistema que ocasionará puede producir mortandades masivas de peces. Otros inconvenientes son la acumulación de agroquímicos en los sedimentos del fondo y la necesidad de repetir las aplicaciones periódicamente. Existe una tendencia mundial a utilizar la menor cantidad posible de agro-tóxicos, lo que produce un rechazo de mucha gente a estos métodos por los efectos secundarios indeseables que puedan ocasionar estos compuestos.
CONTROL INTEGRADO DE ALGAS Y MALEZAS ACUATICAS
Como puede deducirse del punto anterior ningún método es aconsejable para todos los casos o situaciones. Todos tienen ventajas y desventajas, muchas veces contrapuestas. Se debe realizar un control integrado para conseguir una solución efectiva del problema.
Siempre debe analizarse primero si el problema es realmente del cuerpo de agua en sí o si se trata de una aporte externo de materia orgánica que debe ser solucionada o balanceada con una salida equivalente de nutrientes. Lo económicamente sensato es realizar una extracción de materia orgánica de manera que se pueda obtener un rédito económico por ello. Esto se consigue con la piscicultura, fundamentalmente con peces forrajeros (pejerrey, carpas, tilapias, etc.).
En el control integrado de vegetación acuática se suelen usar dos o más métodos, aprovechando ventajas específicas de cada uno de ellos. Los dos pilares de este método son el control biológico de largo término y controles químicos específicos.
En lagunas de la pradera pampeana en usual una colmatación de las mismas con vegetación sumergida (gamba rusa, cola de zorro, etc.), costera (espadañas y juncos) y flotante (lentejuela y repollito de agua). Este fenómeno lleva a: una drástica disminución de las poblaciones de peces (en especial de las más apreciadas como el pejerrey); un paulatino llenado de la laguna con sedimentos; una disminución de la calidad y oxígeno del agua, y un aumento de su temperatura estival.
El control que suele ser más efectivo es la combinación de siembra del pez herbívoro Sogyo (también llamado Amur blanco, “grass carp” o salmón siberiano), con controles químicos y/o mecánicos selectivos.
En severas colmataciones de lagunas o canales, es conveniente realizar un control mecánico inicial, sembrar un número adecuado de Sogyos, y luego hacer un control químico de la vegetación que no sea consumida por este pez (dado que selecciona las distintas especies por palatabilidad).
BENEFICIOS ECONOMICOS DEL CONTROL DE MALEZAS ACUATICAS
El correcto manejo de la vegetación de una laguna tiene las siguientes consecuencias económicas:
- Se consigue una liberación de espacio físico, que puede ser aprovechado por peces y microorganismos.
- Se permite la entrada de luz solar hacia zonas más profundas, favoreciendo la actividad animal y vegetal, con el consiguiente aumento en la producción de alimento para todos los niveles de organismos vivos.
- Se logra oxigenar zonas profundas de la laguna que de otra manera no se encontrarían disponibles para la producción de peces, debido a la existencia de bacterias anaeróbicas y sus derivados, cuya concentración excesiva resulta tóxica.
- Se elimina un ambiente favorable para especies predadoras del pejerrey como tarariras y disentidos.
- Se facilita la pesca comercial y deportiva, rédito económico de las lagunas en cuestión.
- De tratarse de un lugar dedicado a la pesca deportiva de caña, es de suma importancia que puedan utilizarse motores fuera de borda, que no se enreden las tanzas, que exista abundante pesca, y que se cuente con un espejo de agua libre de vegetación por simples razones estéticas.
Todo esto se traduce en una mayor pesca de peces y por lo tanto un substancial aumento de la rentabilidad de la laguna.
El margen neto por hectárea de una laguna puede aumentar desde un 100% hasta alrededor de un 250% por un control integrado eficiente de malezas, lo que significa un ingreso anual adicional por hectárea de entre $48 y $120. La inversión requerida por hectárea suele variar entre $25 y $110 para el control inicial, al que se agrega un costo de mantenimiento anual generalmente menor a $10. Estos valores son de referencia, ya que varía mucho con el grado de cobertura actual, las especies presentes, la geografía de la laguna y el grado de control requerido.
Publicado en la revista Márgenes Agropecuarios.
Arturo M. Ossorio Arana
Ing. en Prod. Agropecuaria